Iba caminando por mi ciudad,cuando me llamó mi atención un letrero que decía“Tienda del cielo”…me acerqué y una puerta se abrió lentamente, allí una niña me entregó una canasta y me dijo:- compra con cuidado todo lo que necesites de la tienda-.Primero compré mucho AMOR y al lado separé PACIENCIA y COMPRENSIÓN que se necesita por donde uno vaya.Aparté dos cajas de SABIDURÍA y dos bolsas de FE.Me encantó el empaque del PERDÓN y compré FUERZA y CORAJE para derrotar el desaliento.Me aprovisione también de buenas cantidades de RESPETO y de mucho BUEN HUMOR.Ya tenía la canasta casi llena cuando me di cuenta que me hacia falta el PODER del Espíritu Santo y que no podía olvidar la SALVACIÓN que me ofrecían gratis.Caminé hacia el cajero para pagar la cuenta pero vi en un estante la ORACIÓN y la tomé porque sabía que la iba a necesitar a diario.Lo mismo hice con la ALEGRÍA, la JUSTICIA y la PAZ que estaban alado de la caja.Llegué delante del cajero y le pregunté:- cuanto debo-, el me sonrió y me dijo:- tranquila, lleva tu canasta donde vallas-…- si pero cuanto le debo,- insistí-, y el volvió a sonreír y respondió:- no te preocupes Dios pagó tu deuda hace mucho tiempo-.
Gracias Señor por lo que has hecho por cada uno de nosotros.Tal vez muchas personas no reconozcan ese sacrificio,pero por amor a nosotros lo hiciste...
Gracias Señor por lo que has hecho por cada uno de nosotros.Tal vez muchas personas no reconozcan ese sacrificio,pero por amor a nosotros lo hiciste...
(Reflexión leída por Norma Pinzón en el programa radial "Pildoritas y Reflexiones).